Eran las 10:55 y escuchaste el timbre, corriste a abrir sin esperar que fuera Paul y ahí estaba el, con un hermoso traje que lo hacia lucir guapísimo pero a la vez no tan formal, tomaste mucho aire y saliste de la puerta y la cerraste, ya afuera te le quedaste viendo y el te abrazo y te dio un beso en el cachete, tu solo cerraste los ojos y cuando se alejo lo viste a los ojos y sonreíste.
- Te ves hermosa- dijo Paul con una gran sonrisa.
- G-g-gracias- dijiste sin saber que hacer.
- Ya desayunaste? – pregunto Paul.
- Em n-n-no- dijiste un poco apenada.
- Que bueno! Porque yo tampoco, te llevare a un lugar muy cerca de aquí a desayunar, esta bien? – sugirió Paul.
- Es- es perfecto P-paul- y sonreíste.
Se dirigió a su auto y te ayudo a subir, fue la primera vez que lo hizo, te sentiste como en la nubes. Salieron del fraccionamiento y se dirigieron a una pequeña casita, un lugar vacio pero muy hermoso, en el camino no dijo nada, y tu tampoco, solo veias como masticaba chicle.
Llegaron al lugar y el te ayudo a bajar del coche, entraron y el fue muy amable, parecía como si ya conociera al dueño, y efectivamente, te platico como es que había conocido ese lugar y te platico muchas mas cosas, y tu siempre le prestaste atención, veias fijamente su boca, y el te veía a los ojos, hablaron y hablaron todo ese tiempo hasta que llego la comida, tu no sabias que ya habían ordenado los alimentos, pero al parecer Paul había ordenado a la hora a la que llegaron, a ti no te importo y comenzaste a comer en lo que Paul te platicaba de su vida y de su carrera como artista, al comer a ti te daba un poco de vergüenza pero el era muy tierno asi que no te importo y comiste muy natural.
Terminaron de comer, Paul pago todo y se retiraron. Paul te dijo que iban a ir a su casa porque se le había olvidado algo, así que se dirigieron al fraccionamiento de nuevo y entraron a su casa. A ti te dio muchísima pena, ya que era la primera vez que entrabas, por suerte no había nadie. Paul fue por lo que tenia que ir y mientras tu esperaste en la sala, veias las fotos de Paul cuando llego por atrás, te abrazo y tu te quedaste inmóvil y te dijo que si querías ver la casa, tu aceptaste. Te dio un recorrido por toda la casa y tu estuviste muy atenta durante todo el recorrido, cada vez que el te enseñaba algún lugar tu lo veias cuidadosamente y el solo te veía a ti.
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