miércoles, 27 de junio de 2012

Capítulo 125.

Fue a dejarlo todo al cuarto, tu lo seguiste y le diste su corbata, cuando se la diste, te dio un suave beso a lado de tu nariz. Paul salió del cuarto, y tu lo seguiste, iban bajando las escaleras cuando Paul volteó y estiro su mano para que tu la tomaras.
Fue a la sala y recogió las fotos, tu te quedaste a su lado mirando a tu alrededor. No te diste cuenta que Paul había terminado hasta que sentiste sus dedos tomando tu mano. Volteaste de inmediatamente y te dio tu bolso y sueter. Por suerte, ese sueter combinaba con lo que traías.
Se dirigieron a la puerta, Paul se puso un saco que estaba colgado junto a la puerta, tu te comenzaste  a poner el tuyo cuando de pronto sentiste como Paul te empezó a ayudar a ponértelo. Tu volteaste y le agradeciste con una dulce sonrisa.
Tomo su abrigo y el tuyo, abrió la puerta y ambos salieron. Cambio los abrigos de mano para poder tomar la tuya, cuando tomó tu mano, te besó la mejilla. Subieron al carro y Paul comenzó a conducir.
No tenias ni la mas minima idea de a donde iban, y al parecer, Paul si sabia. En el camino hacia su desconocido destino, se comportaban un poco apenados, como si fuera la primera vez que salian. Acercaban sus manos lentamente y cuando sentías su piel rosando con la tuya, sentías mariposas en el estómago y te sonrojabas.
No te daba besos en la boca, solo en tus mejillas, era idéntico a sus primeras sitas. Era muy lindo en verdad, estaban muy enamorados ambos. No sabias exactamente porque se estaban comportando asi, seguramente era por lo de anoche y estaban ambos apenados o algo por el estilo.
Llegaron a un lindo vecindario, las casas no eran nada lujosas, de hecho, eran simples y acogedoras. Paul se veía un poco nervioso al llegar  a ese lugar. Sentiste como su mano sudaba, cosa que jamás habías sentido en él, también, estaba mordiendo sus uñas, cosa que hacia siempre que estaba nervioso.
Se estacionaron en frente de una casa, Paul respiró hondo y te sonrió. Tu no sabias lo que pasaba asi que solo le seguiste la corriente. Bajaron del carro ambos al mismo tiempo.
-       Como me veo?- te pregunto preocupado.
-       Muy bien Paul- dijiste titubeando, jamás decía ese tipo de cosas.