El se iba alejando con sus manos en sus bolsillos y tu te ibas alejando, tambien, con tus manos ocupadas en todas tus cosas, ibas caminando como si acabaras de despertar de un sueño, no lo podias creer, en verdad pensabas que era un sueño, no lo podias creer. En ese momento te diste cuanta de que en verdad te gustaba Paul, desde el momento que lo viste por primera vez, solo que no lo querias aceptar y evitabas el pensamiento.
No habia pasado nada de tiempo, de hecho, aun podias ver a Paul a lo lejos, dirigiendose a su casa. En eso llegaron las gemelas corriendo hacia ti, te notaron rara.
- Que pasa Regine?- Pregunto Veronika.
- Esque, si les digo, creo que me asesinaran.- dijiste con una gran sonrisa. Ambas no supieron a que te referias y solo se voltearon a ver una a la otra, vieron como se alejaba Paul y reaccionaron, abrieron sus ojos y boca, y te vieron sorprendidas.
- No lo puedo creer! Estoy muy feliz por ti!- dijo Rebecca con una sonrisa enorme.
- Yo igual!- dijo Veronika.
- Pero... si ni les he dicho nada y ya estan felices!- dijiste con tu pícara voz.
- Lo sabemos, pero ya sabemos que nos vas a decir y ya sabiasmo que esto iba a pasar, te dije que Paul no veia asi a cualquiera- dijo Veronika.
- Bueno, eso es lo que me dijo- dijiste intimidada.
- Es en serio?- dijo asombrada Rebecca- Bueno, ahora si es necesario que nos cuentes todo de pies a cabeza por favor!- ordeno rebecca y tu reiste muy felizmente y ambas te jalaron hacia su casa.
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