Llegaron a un rinconcito con muchas flores, Paul solo te seguía, tu te sentaste y el se sento a tu lado.
- Porque tanta prisa?- pregunto Paul.
- Es que vi que las gemelas iban llegando y pues tu sabes, quiero evitar el cuestionamiento- dijiste agitada.
- Ah, si esta bien, no importa, entiendo- contesto Paul.
Paul se puso frente a ti, ambos tenían las piernas cruzadas para que quedaran mas cerca, tu vestido quedo muy corto cuando te sentaste asi, no te diste cuenta y por supuesto que no lo hiciste a propósito, pero Paul si se dio cuenta de tu vestido corto, lo notaste porque hizo esa sonrisa pícara que tanto te gustaba y te empezó a besar, te recargaste en tu pierna y te diste cuenta de eso. Te alejaste de Paul y te acomodaste el vestido, se sonrojaste muchísimo, y Paul sonrio.
Empezaste a sacar tu cuaderno y estuche, abriste tu cuaderno y le enseñaste a Paul todas las tonterías que escribías o dibujabas en clases, reian mucho, escribías cosas realmente locas, y Paul te conto sobre cuando el escribia todo al revés y en lo mucho que insistia en hacer las cosas al revés. Tenian tanta risa que terminaron acostados en el pasto riendo, el se acosto a lado de ti aun riéndose ambos. Tenias el cuaderno aun ahí viéndolo, pero dejaste de reir de repente, pues llegaste a la parte del cuaderno de las fechas en las que Paul te había dejado, había dibujos tristes y frases tontas de desilusion, Paul vio como estabas decepcionada asi que se lanzo encima de ti y te comenzó a besar, era un beso dulce y lo único que hiciste fue dejar el cuaderno a un lado y tomar su cuello.
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